Escenarios
•Destino de un jubilado
•Volverse mandilones
•Cuidar a los nietos
Luis Velázquez
03 de febrero de 2021
UNO. Destino de un jubilado
El destino de los hombres jubilados gira alrededor de los siguientes ejes:
A, se vuelven chofer de la esposa. B, se convierten en unos mandilones. C, aprenden a cocinar y ellos preparan el desayuno y la comida, en tanto la mujer duerme y se va con las amigas.
D, tienden las camas, barren y pasan jerga y riegan el jardín, pasean la mascota en el parque de la esquina.
Y E, y en las tardes, con el tiempo libre que les deja la señora, toman café con los amigos para llenarse de nostalgia “pues recordar es vivir”.
DOS. Cuidar a los nietos
Más todavía: Hay jubilados a quienes los hijos les encargan cuidar a los nietos. Incluso, si aún están aptos y capacitados para manejar, entonces, les asignan la tarea de recoger a los niños en la escuela y llevarlos a casa.
O si los hijos tienen un compromiso, llevar a los nietos a comer en casa y estar con ellos para hacer la tarea.
Incluso, si es necesario, hasta organizar una piyamada para los nietos y que tanto gustan a los niños porque se desvelan, como adultos, hasta las doce de la noche, y si los abuelos se descuidan, hasta la una de la madrugada.
TRES. Apapacho de los abuelos
En el caso de los nietos suelen darse diferencias con los hijos.
Por ejemplo:
Los abuelos están para apapachar a los nietos. Prohibido prohibirles un gustito, un jueguito, una acción. Prohibido regañar. Prohibido enojarse con ellos, pues, en todo caso, es tarea de los padres.
Y si los hijos se enojan, primero, allá ellos. Y segundo, solo queda que el abuelo jubilado aseste un manotazo para definir con precisión los hechos, antes, mucho antes de que los hijos se monten en los padres ancianos.
CUATRO. Ganar indulgencias
Hay parejas donde la vida del jubilado y la pareja se vuelve un infierno y todos los días pareciera que están confinados en un costal como perros y gatos.
Y, bueno, si ya vivieron juntos 40, 50 años, caray, un divorcio significa una locura.
Solo resta contar hasta cien antes de estallar contra la pareja pensando que con la tolerancia consabida se ganan indulgencias en el otro lado del charco.
CINCO. Paraíso del jubilado
El jubilado tiene su paraíso. Es con los amigos en el café donde sueñan cuando miran pasar a una chica guapa, bonita y atractiva.
Y al mismo tiempo, recuerdan los días contrariados, tormentosos y fascinantes vividos “oliendo a leña de otro hogar”.
En todo caso, y como sucede en la novela de Yasunari Kawabata, “La casa de las bellas durmientes”, donde los viejitos contratan a una chica durante una noche pero a la que solo pueden mirar y admirar en tanto ella, empastillada, duerme desnuda boca abajo en el tálamo.
SEIS. Lo demás es ganancia…
El terapeuta familiar del barrio dice que nada hace más feliz a un jubilado que sembrar unas florecitas en el jardín y regar el pasto.
Y al mismo tiempo, jugar con los nietos y leerles libros de cuentos y juntos escuchar música.
Y, bueno, en un tiempo normal, sin coronavirus, llevar los nietos al cine a una película infantil y comer palomitas con refresco de cola en la oscuridad de la sala.
Desde luego, obsequiar un perrito a los niños y divertirse buscando un nombre a imagen y semejanza y sacarlo a pasear al parque de la esquina.
Lo demás, como dice el viejito del pueblo, es ganancia.
Expediente 2021
El Partido… partido
Luis Velázquez
03 de febrero de 2021
MORENA es un Partido… partido. Igual, igualito, como en los peores tiempos del PRI. “Pasioncillas políticas” les llamaba José Vasconcelos Calderón. Y por más y más que Esteban Ramírez Zepeta sienta y crea que “no podemos convertirnos en lo que tanto criticamos”, ya lo son.
López Obrador dejó el PRI del gobernador Enrique González Pedrero en Tabasco por las pasiones internas, las tribus dislocadas.
También dejó el PRD por la misma razón.
Y, bueno, la maldición de la caja de Pandora es atroz y cruel.
MORENA Veracruz en medio de par de pasiones:
En un lado, el góber jarocho emberrinchado en imponer a Ramírez Zepeta como líder estatal. Y en el otro, Gonzalo Vicencio jugando las contras, argumentado un papelito otorgado por la autoridad electoral donde lo reconoce como encargado del partido.
(Aquí, una disculpa. Se ha publicado que Vicencio está ahí porque el dirigente nacional, Mario Delgado, gente del senador Ricardo Monreal y del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, lo apoyaba.
Pero un militante de MORENA precisa hechos:
Uno. Nunca Vicencio se la jugó en Veracruz por Mario Delgado. Los únicos que se sumaron a su proyecto partidista fueron los diputados Ricardo Exsome Zapata, Jaime Humberto Pérez Vardavé y Julio Carranza.
Y si Vicencio está ahí es por un tribunal electoral que lo avaló.
Vicencio fue presidente municipal de Chicontepec y de allá Manuel Huerta Ladrón de Guevara lo invitó a la dirigencia estatal, pero luego, se deslindaron y cada uno siguió camino).
El 4 de diciembre del año anterior, Zepeta platicó con el reportero Noé Zavaleta. Entonces, le dijo:
Uno. “No vamos a fallar” ni a la militancia ni a MORENA ni a López Obrador.
Dos. “Hay dos mil cargos de elección popular para repartirse”.
Tres. “Ningún secretario del gabinete legal de Cuitláhuac García”, anexos ni conexos” impondrá alcaldes”.
Y cuatro. “Nunca me pasó por la cabeza ser dirigente de MORENA, pero el diputado Juan Javier Gómez Cazarín” me empujó.
Un mes después, Ramírez Zepeta pareciera estarse tragando sus palabras. Un político más que se desdice a sí mismo. Y evidencia.
Por ejemplo, en la rebatinga por el poder partidista con Gonzalo Vicencio, llevan varias semanas en el palenque, obsesionados ambos en quedarse con la silla embrujada del edificio partidista.
Y ninguno cede. Apuestan a ver de qué cuero “salen más correas”. Ambos, trepados en el macho. En la soberbia total, sin conocer la humildad, la mesura y la concordia.
Y si es cierto, como dijo, que hay “dos mil cargos públicos para repartirse”, en ninguna parte ha cabido la prudencia.
Van por todo. Y todo es todo, por ejemplo, la candidatura a gobernador y a presidente de la república en el año 2024.
Pero, bueno, López Obrador tiene COVID y aun cuando ya regresará a las mañaneras, ni modo de aplicarse con un manotazo para dirimir las pasiones.
Nada fácil que la novela de Morris West, El arlequín, se cumpla en Veracruz y un tercero, o cuarto, en discordia, salga palomeado.
Así, Vicencio ni Zepeta se saldrían con la suya.
CEN DE MORENA LOS REBASÓ POR LA IZQUIERDA
De hecho y derecho, el CEN de MORENA parece haberlos excluido.
Por ejemplo: en la Ciudad de México registraron a los aspirantes y suspirantes a las candidaturas a diputados federales por Veracruz.
Del día primero al catorce de febrero, registran a los precandidatos a presidentes municipales, síndicos y regidores.
Y del 14 al 21 de enero, a los precandidatos a diputados locales.
Y en el caso de los municipios más importantes de Veracruz la decisión será tomada en base a encuestas y que, todo indica, ya las levantaron en muchos casos.
Tan es así, que por ejemplo, y de acuerdo con las versiones, Ricardo Exsome Zapata será, es, el candidato de MORENA a la presidencia municipal de Veracruz, porque en todas las encuestas, tanto internas como externas, incluso, frente a Bingen Rementería y Miguel Ángel Yunes Márquez, sale arriba.
La periodista Rosa María Hernández estaría palomeada para la candidatura a diputada federal.
Y Fernando Arteaga Aponte, para la diputación local.
En Coatzacoalcos, Amado de Jesús Cruz Malpica tiene amarrada la candidatura a presidente municipal y la diputada local, Mónica Robles Barajas, lista para la curul federal por la vía pluri.
ZEPETA, EL ILUSO
Pero entre más partido siga MORENA, la esperanza de la alianza PAN, PRD y PRI y el partido Movimiento Ciudadano de Dante Delgado se ampliaría en toda su dimensión.
Pasiones así, la historia lo confirma, únicamente terminan en la fractura política y la deserción de los militantes a otros partidos.
Y en tiempo de elecciones como ahora (212 presidentes municipales y 50 diputados locales y 30 federales a disputarse en las urnas el 6 de junio), los otros partidos se benefician.
Incluso, y por más que Zepeta advirtiera que “ningún secretario del gabinete” ni anexos y conexos impondría candidatos, la realidad lo ha rebasado.
Por ejemplo, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, destapó en su oportunidad a par de sus favoritos. Ricardo Exsome Zapata, para la alcaldía de Veracruz, y Amado Cruz Malpica, para Coatzacoalcos.
El secretario de Educación, Zenyazen Escobar, al diputado local, Rubén Ríos, para la candidatura a la presidencia municipal de Córdoba, y a su esposa, para la curul local por el distrito de Orizaba.
Juan Javier Gómez Cazarín, el destapador de Ramírez Zepeta, dice que su lugar está en la Junta de Coordinación Política del Congreso local y repetirá, en tanto promueve a su padre para la alcaldía de Hueyapan de Ocampo.
Pobre iluso, entonces, Zepeta.
Además, ni modo que con su palabra quiera borrar de un plumazo el sistema político, sea de la derecha, el centro o la izquierda. Los jefes tribales siempre imponen a los suyos. Es, digamos, un derecho divino.
BASTARÍA MANOTAZO DEL GÓBER
Lo más indicativo es que ninguna de las partes en MORENA codicia el poder pensando en el bienestar social de la población, aquella frasecita obradorista de que “por el bien de todos primero los pobres”.
Ellos andan en la rebatinga para seguir ejerciendo el poder con sentido patrimonialista. Utilizando, claro, a los pobres “como carne de cañón”.
Nada ilustra los hechos como, por ejemplo, la frase de Gómez Cazarín: “Mi lugar está aquí en la JUCOPO. Voy por la reelección como diputado local”.
Y ni modo que como hacedor de Zepeta sea bloqueado.
Bastaría recordar que el diputado de MORENA, Magdaleno Rosales Torres exhibió a Gómez Cazarín, y a su vocero, Aldo Valerio (parcela de poder de Zenyazen Escobar) con el usufructo legislativo de varios medios digitales y nada, absolutamente nada, sucedió.
Quizá a Magdaleno Rosales faltó interponer la denuncia penal en la Fiscalía General… para ver si procedía, ajá.
El partido de López Obrador está partido en Veracruz. Y han perdido la serenidad, la prudencia y la mesura, pues bastaría, quizá, un manotazo del góber.
Barandal
•Asesinadas 10 mujeres
•En 21 días de enero
•“La ley, letra muerta”
Luis Velázquez
03 de febrero de 2021
ESCALERAS: Marea Verde Altas Montañas es un colectivo feminista. Luchan, como tantos otros, para que el oleaje de violencia contra la población femenina de Veracruz (6 de cada diez personas son mujeres) pudiera, con un milagro disminuir. Incluso, desaparecer.
En un primer balance del año 2021 que camina, el dictamen es fatídico. Y ninguna esperanza alienta. Por ejemplo, en los primeros 21 días del año, diez mujeres asesinadas. Una cada tercer día.
Y si se considera que el góber bendecido por López Obrador es el político más honesto del Golfo de México y pidió a los medios que “no sean alarmistas” porque Veracruz “ya no se tiñe de rojo”, caray, ha de soñar la población del Estado, como los marinos en su canción inmortal, “irse a vivir al fondo del mar/ porque en la tierra ya no se puede vivir”.
PASAMANOS: La ley, dijo Luz María Reyes Huerta, de Marea Verde, es letra muerta. Y las mujeres, “nunca hemos sido prioridad para el gobierno”.
Y si en el gobierno de Veracruz se inmolan en la plaza pública y en la mesa de los sacrificios dándose golpes de pecho se trata de un reality-show.
El discurso populista jurando ante el altar de la patria que los feminicidios y la violencia van para abajo.
Pero, bueno, cada quien recrea su mundo rosáceo y en el viaje extraterrestre se lo creen.
CORREDORES: Los días y las noches salvajes de Veracruz sustituyendo a la “noche tibia y callada” de Agustín Lara.
Nunca Javier Duarte fue humilde, prudente y mesurado para actuar ante el crimen de diecinueve reporteros y tres desaparecidos y Veracruz fue convertido “en el peor rincón del mundo para el gremio reporteril”.
Tampoco el góber de López Obrador tiene voluntad política y social para escuchar y decidir sobre los feminicidios, oliendo a pólvora y río de sangre.
BALCONES: El duartazgo fue un gobierno de sordos. Bastaría recordar que sus cuatro guardias pretorianos (Adolfo Mota, Jorge Carvallo, Alberto Silva y Érick Lagos) lo circundaron tanto que ni el viento ni el humo de los cigarrillos pasaba entre ellos.
Ojalá que el sucesor del góber fifí sea de MORENA y su tribu. De lo contrario, el riesgo de que el sucesor haga un drástico, atroz y feroz ajuste de cuentas, pues varios del gabinete legal y ampliado terminarían en Pacho Viejo o en el Reclusorio Norte.
PASILLOS: Si los feminicidios siguen… Y también los crímenes de odio… Y los homicidios de activistas sociales… Y de políticos y líderes partidistas… Y de niños y ancianos… Y de taxistas y reporteros…, significa, y “sin buscar más patas al gato” que la vida pública, la tarea de gobernar, el ejercicio del poder sexenal está fallando.
VENTANAS: Marea Verde “pone el índice en la llaga purulenta”. Uno, la Ley de Acceso a una Vida Libre de Violencia, una simulación. Dos, la insuficiencia presupuestal. Tres, Las Fiscalías, sin personal capacitado. Cuatro, Las dependencias encargadas, permeadas por la corrupción. Cinco, la justicia como un botín económico. Seis, Las denuncias de violencia contra las mujeres, engavetadas (La Jornada Veracruz, Fernando Inés Carmona).
Se ignora si la denuncia de Marea Verde trascienda en el ánimo oficial para ser y hacer y trascender. Pero mucho se duda. Llenos de soberbia, en la 4T mejor prefieren mudar en sordos. Los sordos del palacio.
Entre más feminicidios más irritación social. Y más población electoral desencantada. En las urnas será el ajuste de cuentas.
Malecón del Paseo
•Sentido a la vida
•Luchar todos los días
•Los amigos felices
Luis Velázquez
03 de febrero de 2021
EMBARCADERO: Un eje rector en la obra literaria de Albert Camus (“El extranjero”, quizá la novela más conocida, Premio Nobel de Literatura) es dar un sentido a la vida… Definir con precisión y claridad las razones por las cuales cada ser humano ha de vivir todos los días… Y al mismo tiempo, luchar… Luchar, incluso, como El Quijote y Sancho Panza, “contra los molinos de viento”… Luchar, como en su novela Sísifo, contra el absurdo desafiando “a los dioses” para alcanzar una vida plena… En ningún caso, dejar que la vida te vaya llevando, sino al contrario, tener, digamos, metas concretas y específicas a corto, mediano y largo plazo…
ROMPEOLAS: En la niñez, la pobreza y la juventud, Camus vivió en la más espantosa pobreza… A los 2 años su padre murió en la guerra… Y su madre era analfabeta y ganaba la vida como trabajadora doméstica… Y era una mujer callada y solitaria, lejana y ausente de sus dos hijos… La abuela se volvió la jefa de la familia… Pero la abuela, quien había ejercido el matriarcado con nueve hijos, era dura con los nietos…
ASTILLEROS: Vivían en un edificio muy jodido… Por ejemplo, un solo baño para las familias habitando cuatro pisos… En las noches, los pasillos sin luz interior… Una cueva del lobo… Camus encontró la felicidad con los amigos en la playa, con el sol y la luna, nadando en el mar, jugando fútbol en la arena, soñando con mundos lejanos… Y con un profesor en la escuela primaria que le prestaba un libro tras otro para que leyera… Supo así que más allá del pueblo donde vivía estaba la posibilidad de vivir con dignidad y migró a París…
ESCOLLERAS: Estudió Filosofía, pero fue periodista y el periodismo lo llevó a la literatura, igual, igualito como se afirma que la mayor parte de reporteros en el mundo tienen una novela escrita guardada en el cajón del escritorio… Entonces, cotejando su vida en la miseria y su vida como escritor y filósofo convirtió en razón superior dar sentido a la vida abrigando sueños, utopías, ilusiones, tanto personales y familiares como sociales… La lucha, pues, por una vida plena, más allá de trabajar todos los días para ganarse unos centavitos para comer y vestirse…
PLAZOLETA: La vida de Camus recuerda la filosofía del neurólogo, siquiatra y filósofo austríaco, Víctor Frankl, tres años confinado en campos de concentración nazi… Su libro más conocido se llama “El hombre en busca de sentido”… Allí plantea la siguiente tesis… El hombre, dice, tiene o puede tener un trío de razones fundamentales para vivir… La primera, una causa familiar y amical, por los suyos… La segunda, una causa social, luchando por enaltecer la calidad de vida de la población… Y la tercera, una causa religiosa, vivir para entregarse al Ser Superior, Dios, como sacerdote, monje o monja… A partir de ahí, luchando cada día para ser mejor… Tal cual como escribió What Whitman en un poema… “No dejes pasar un solo día sin crecer”…
PALMERAS: El Sísifo de Albert Camus lucha contra lo imposible para ser y hacer y estar contento y satisfecho consigo mismo… Lo más importante, dejar una huella en la vida enaltecida, ya de la familia (lo prioritario), en el pueblo donde se vive, desde la religión… Nada de caminar en cada nuevo amanecer así nomás, porque estamos vivos y debemos trabajar, de tal forma que todos los días se vuelven repetitivos y se camina por inercia…
